Hoy en día la propaganda hace estragos a través de los medios de comunicación creando rápidamente una moda por lo que el efecto nocebo que consiste en sufrir una serie de eventos adversos como consecuencia de expectativas negativas que nos hacen creer que un medicamento, remedio o terapia no funcionará o, incluso, nos perjudicará, es muy común en ciertas personas cuando ingiere un alimento o medicamento que cree que le va a producir un daño, el cerebro sugestiona al cuerpo para que el daño se produzca realmente.
España finalizó en el 2018 con una población aproximada de 46.468.102 personas, de ellas casi 14 millones de españoles sufren enfermedades alérgicas. Unas de ellas alteran la permeabilidad intestinal, que pueden estar influenciando esa permeabilidad negativamente por diversos factores, infecciones intestinales, deficiencia de inmunoglobulina A (IgA) secretora, alergias alimentarias (IgE), intolerancias alimentarias (IgG) que son menos conocidas, al ser sus manifestaciones más tardías y menos evidentes que las alergias IgE mediadas, estas no se diagnostican o se confunden con otras patologías, o no se tienen en cuenta y la persona convive con ellas.
No obstante la mayoría de alergias que sufren las personas de cualquier forma no son debidas a los alimentos, porque el 60% de todas las enfermedades alérgicas sean las que sean son las que afectan a las vías respiratorias como es la rinitis, 6 millones y casi 3 millones de alergias de la piel y otros tipos de reacciones. Con el fin de facilitar su comprensión, voy a desarrollar mi exposición principalmente de una forma básica aproximada y fácil.
Empecemos por los datos obtenidos del Centro Europeo para la Fundación de Investigación de Alergias (ECARF), (CODEX, 2006).Por otra parte el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social nos dice que del 1 al 3% de los adultos en España tiene una alergia alimentaria, debido ese resultado al conjunto de alimentos muy variados, no a uno en concreto específico. Como no nos los da exactos, trabajaremos con la media de los dos.
Comenzaremos por cuantificar el porcentaje basado en el 1%, resulta:
Que si de cada 100 personas hay.................................................. 1 alérgica
De 46.481.102 personas que hay censadas habrá......................... X alérgicas
Resultado 46.481.102 x 1/100, que será igual a un total de........... 464.811 alérgicas
Seguidamente cuantificamos el porcentaje basado en el 3% resulta:
Que si de cada 100 personas hay.................................................. 3 alérgicas
De 46.481.102 personas que hay censadas habrá......................... X alérgicas
Resultado 46.481.102 x 3/ 100, que será igual a un total de.......... 1.394.433 alérgicas
Una vez tenidos los resultados hacemos la media de ellos que será la suma de:
464.811 + 1.394.433, la cual la dividimos por 2, obtendremos un resultado de personas alérgicas de: novecientas veintinueve mil seiscientas veintidós (929.622), las cuales no lo son de todos los alimentos sino digamos a un alimento en concreto. Si estos novecientos veintinueve mil seiscientos veintidós lo repartimos entre los once grupos de responsables alérgicos significativos (dato obtenido de mi artículo "Alimentos y reacciones alérgicas")
¿Qué cantidad de personas alérgicas le corresponderían al gluten?
929.622/11=84.511 personas
Finalmente si el censo español es de 46.468.102 personas y 84.511 son alérgicos al gluten, el porcentaje de las personas sería (100 x 84.511/ 46.468.102) equivalente al 0,18%.
El resultado es insignificante, un 0,18% de personas son alérgicas al gluten
Podemos decir y afirmar que en este asunto hay mucho ruido y pocas nueces o a quizás debemos decir como el filósofo romano Lucio Anneo Séneca
Cui prodest scelus, is fecit
(Quienes se han beneficiado de este asunto)
Notas:
-En la mayoría de los casos, las reacciones corporales de la alergia a los alimentos es relativamente inofensiva. Aunque hay “un pequeño porcentaje”, y repito, de pocas personas que estas reacciones pueden desembocar en enfermedades que pongan en peligro la vida, como por ejemplo los cacahuetes (manís) y otros frutos secos (una de las causas más frecuentes de ataques de alergia grave con lesión directa de componentes de la dieta sobre las vellosidades y estructura de la pared intestinal o deficiencias de dicha mucosa).
Aviso a navegantes
-El equipo de científicos dirigido por André T. Chan de la Escuela de Medicina de Harvard (EE. UU.) indica que las personas que, sin padecer la enfermedad celíaca, eliminan el gluten en su alimentación, pueden acabar aumentando el riesgo de sufrir dolencias coronarias graves. Por ello afirman que "no debe fomentarse una dieta sin gluten entre personas sin la enfermedad celíaca", subrayan que los ciudadanos que evitan en su alimentación el gluten y por tanto no ingieren trigo, cebada, avena o centeno que lo contienen al prescindir de ellos les aumenta las posibilidades de sufrir más fácilmente enfermedades coronarias. Artículo publicado en la revista médica British Medical Journal.